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Nada hay en la mente que no haya estado antes en los sentidos.
Aristóteles

Anoche cabalgué, en llamas, hacia el horizonte.
Fué increíble lo que sucedió en ese sueño pues escapó del ático el peor de todos mis yoes: el ser humano, donde estaba encadenado bajo mil candados, encapuchado y olvidado.

Como consecuencia de mi personalidad habitualmente ocurre que la gente tiene la necesidad, o la mala idea, de abrir en dos su pecho y confiarme secretos tan íntimos que les podría complicar la vida si en cierta ocasión los revelara. Obviamente los guardo con celo y jamás, pero jamás, violaría la confianza que me entregan.
Por otra parte tengo la virtud de ser un gran conversador. Si!, un maldito parlanchín al que le encanta conversar, conocer, descubrir y poder comprender a mi interlocutor de quien no solo recibo información de vida.
Cuando conversamos con alguien no solo recibimos una linda historia, también recibimos emociones, actitudes e información que esta contenida en el metalenguaje... razón por la cual los chat y estas basuras de blogs impersonales impiden conocer realmente a un individuo. Al conversar frente a frente puedes analizar, comparar y provocar estímulos en las personas que siempre tienen una respuesta no verbal que baja sus barreras y las desnuda ante tí. Claramente existe una condición de entrega por parte del receptor quien debe permitir voluntariamente que esto ocurra y no quedar totalmente a merced de la situación. Pero en términos generales la información que se puede obtener es grande, simplemente observando con atención.

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Todo comenzó al llegar a un pequeño y oculto parque, un lugar de niños y de nostalgias del pasado, con fuentes de agua, pérgolas y caminos de piedra. El lugar preciso para una gran reunión.
Así llegamos todos, uno a uno, a tomar el té en aquella gran mesa. Todos sentados bajo un atardecer pintado de oro y besados por la delicada brisa de verano.

Me pasas el agua?, pan?, mantequilla?.. quieres un pastelito?

Todo iba de maravillas hasta que... obviamente... algo ocurrió. Ni idea que fué, pues los sueños son nubosos, pero gatillo en un personaje de esta convivencia una actitud impropia, que rompió la estabilidad... mi estabilidad y felicidad en la mesa. Con una violencia inusual y desmedida, clásica de héroe gringo, lo ataqué. Para su decepción no fueron golpes lo que le propiné. No rompí su cabeza contra el suelo ni le di bofetones hasta que mis manos sangraran... no señores del jurado!, lo torturé con mi peor y más peligrosa arma... mi boca.
Conociéndolo de siempre, lo ataqué venenosamente con acertijos y juegos lógicos de palabras que esperaban una respuesta que solo yo, de los que estábamos en ese lugar, conocía.

'Dile al mundo que eres gay, basura!. Sal de closet y retuércete en la angustia y sufrimiento que te provoca tu imposibilidad de aceptarlo y vivir tu vida libremente '.... soy un hijo de puta

Lo maltraté durante mucho tiempo. El resto de los comensales no compredía que ocurría. Él, angustiado, trataba de desviar la atención a otros temas donde nuevamente era acosado, provocado y puesto en jaque para mi estúpido ajusticiamiento.

'Acaso no es de tu gusto jugar y humillar a otras personas'.
Si bien es un pesado es una buena persona, no merecía algo así. Pero algo en mi se descontroló. El tipo este quedo hecho un trapo... y yo estaba satisfecho.
Toda la gente me apuntaba y reprendía. Alegaban que era malvado, cruel y despiadado. Cosas que no escuchaba pues no me importaba nada.
La cálida reunión de amigos se fué al carajo.
Con una reverencia me fuí de aquel lugar silbando. Con las manos en los bolsillos y un paso descansado me disponía a cruzar el portal cubierto por rosales... y ahí estaba ella... sentada en una banquita mirando los patos.
Jamás debí cruzarme por su mirada de horizonte.
"Hola"
"Hola"
"¿Que haces?"
"Justicia!"
"Mmmm"
"¿Por que 'Mmmm'?"
"Porque la justicia, llevada a la práctica , es injusta. Siempre el condenado sufre. Y eso no es justo "
"Eres un puto Pepe grillo!"
"Alguien tiene que serlo, ¿no?. ¿Vamos a tomar un té?"
"No deberíamos..."
"Porque no es justo?...
"Justamente!"... me sonrío.
Caminamos y fuimos a su casa... mi casa... un espacio que desconozco.
Conversamos y bebimos té hasta que la mesa estaba vacía. Al levantar los platos nuestras frentes se acercaron.. demasiado... se juntaron... tanto que oíamos nuestros jadeos, nuestras urgencias... nuestra necesidad de sublimar algo.. de escapar. Nos desvestimos como escolares y nos amamos amalgamando ternura, violencia y deseo. Al descansar ella se durmió sobre mi pecho, abrazándome como yo la abrazaba en ese minuto, sin dejarla escapar.
"Esto no es correcto. No soy yo con quien debes hacer esto"
"Nop, pero yo tampoco soy perfecta".


"Something i can´t have", Jesus and mary chain